La violencia, el racismo y la discriminación que emergieron en la ciudad de Cochabamba el 11 de enero de 2007 en contra de campesinos, volvieron a manifestarse en 2019, dijo el asambleísta departamental Sergio de la Zerda, quien pidió estar atento al pragmatismo coyuntural del alcalde, Manfred Reyes Villa.
El asambleísta por Cochabamba, entrevistado en el programa “Contragolpe”, de radio Patria Nueva, lamentó que en 2007 murieron tres personas en circunstancias violentas en medio de ataques de grupos juveniles citadinos que portaban bates de beisbol con el fin de expulsar a mujeres y varones campesinos que llegaron a la urbe cochabambina.
“Son heridas profundas que no sanan y se profundizaron en 2019”, indicó.