Elizabeth nos lleva por un complejo dancístico que se compone de agentes tanto verbales como no verbales, los cuales se combinan en
música, texto literario y la actuación o movimientos dancísticos. Los nombres que reciben comúnmente son: danzas de conquista o morismas,
pues incluyen a “Moros y Cristianos, “Santiagueros”, “Doce pares de Francia”, entre otros nombres.