A principios de los 60, James Hadley Chase escribe “Una radiante mañana estival” para hablar de un secuestro, en el subgénero literario “cruel”; por las mismas fechas, en Hong Kong King Hu dirige el filme “Bebe conmigo”, preciosista filme wuxia (cine de ficción con peleadores de artes marciales) que inicia con otro secuestro. Solo el arte puede hacer que tal delito conmueva para bien.