¿Cuántas veces esperamos a qué otro arregle lo que nos hizo? Lo importante es entender que si hay algo que necesitas ajustar para vivir la vida que queres, dejes de esperar a qué el culpable arregle las cosas. Puede que no tengas la culpa de lo que pasó, pero es tu responsabilidad hacer lo que debes para estar en el lugar que queres.
Yo no tengo la culpa de que llueva, pero es mi responsabilidad elegir usar paraguas o mojarme.
La responsabilidad y el tomar acción siempre te van a llevar a un lugar de libertad y protagonismo de tu vida.
Solta el juego de "quién tuvo la culpa" y enfócate en tomar las acciones que te lleven a donde queres ir.
