“Esta es una Palabra de edificación, exhortación y consuelo.
A través de este mensaje, el Dios Viviente te enseñará las causas por las cuales tú no debes convertir una costumbre el hecho de no congregarte, de no reunirte con tus hermanos en Cristo, con aquellos que fueron lavados con la misma sangre que el Señor te lavó y limpió de tus pecados.
El Señor demanda, a través de su Sabiduría, que tú te congregues porque Él quiere revelarte quién es Él.
Tú tienes que reunirte con tus hermanos para adorarlo, para escuchar su Palabra y alimentarte de ella. Sean cuales sean las dificultades y los problemas que se te presenten, tú tienes el Poder para vencer a toda fuerza espiritual del enemigo que quiere impedir que lo hagas.
Debes saber que desde el momento en que tú te acercaste al Señor Jesús y lo reconociste como Señor y Salvador de tu vida, el Dios Todopoderoso en Cristo Jesús va delante de ti. ¿Y cuál es su propósito? Guiarte, enseñarte, redargüirte, corregirte; porque en ti aún hay muchos lugares torcidos: en tu mente, en tus emociones, en tu voluntad, cosas que no le agradan al Señor. Mas ahora es el tiempo que esos lugares torcidos sean enderezados por el Poder de Dios y de su Palabra.
Para que tú puedas ser enseñado, corregido e instruido en justicia, tú tienes que congregarte. Al congregarte recibes alimento espiritual que te da crecimiento, de tal modo que estés preparado para el momento del arrebatamiento, para el instante cuando el Señor emita su voz de trompeta como estruendo de muchas aguas y te llame a su Presencia. El encuentro con tu Señor y Salvador, con Jesucristo, es la esperanza que tú debes tener. Él es el que te fortalecerá para guardar su Palabra, para que estés preparado para su Segunda Venida.
El Señor quiere que tú sepas que su Segunda Venida está cerca, el Día del Señor está a las puertas, y será un Día de destrucción repentina que vendrá sobre los moradores de la tierra. Y nosotros como iglesia de Cristo, somos la novia de Jesús, del Cordero; y pronto Él vendrá a rescatarnos, a llevarnos con Él. Y muchas vidas que no se congregan, no estarán con sus lámparas encendidas, porque no se habrán alimentado de la Palabra de Dios, no tendrán Conocimiento ni vida espiritual, y ni cuenta se darán que habrá ocurrido el arrebatamiento y que sus hermanos en Cristo desaparecieron de la faz de la tierra; los buscarán, pero no los encontrarán.
Por eso es importante que recibas esta Palabra, porque el Señor te ha llamado y quiere que vivas y cumplas sus Leyes. No debes dejar de congregarte, que nadie tome tu corona porque tú eres rey, que no se diluya el Espíritu de Dios, el Aceite de la Santa Unción con el cual Él te ha ungido como rey y sacerdote, y como siervo de Él”.
Pr. Ricardo Claure Peñaloza
PARA QUE SU IGLESIA SE PREPARE… PARA TESTIMONIO A LAS NACIONES