El “no lo vimos venir” (al fenómeno Milei) es la contundente confirmación de la profunda crisis de capacidad de comprensión de la sociedad, que tiene la dirigencia política nacional y provincial. Cláusula gatillo mensual y aumento en las asignaciones son buenos atenuantes, pero para pocos. ¿Peligra la segunda parte del Acueducto a Pico?