Hebreos 12:1 Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante. 2 puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios.
Llamados a traer el cielo a la tierra
La sagrada Escritura es un libro de comunicación de Dios con nosotros, por un lado nos enseña a un Dios que se revela al hombre con un plan para rescatarlo y por otro lado nos enseña a hombres en su búsqueda por hallar a Dios.
Hombres que marcaron el lugar donde pisaron o posaron, hombres de fe que tomaron territorios. Hombres a los que Dios le decía mira el cielo, cuenta las estrellas, y voy a abrir mi corazón, yo le digo papá es imposible contarlas y El Señor dice así será tu generación serás Padre, madre de multitudes, te multiplicare en lo imposible, pero Señor yo no lo puedo entender, es que mis pensamientos y mis caminos son mayores a lo que vos podés entender, solo tienes que creer, me amas,? Señor sabes que te amo, vuelve a creerme hasta la inocencia de la locura. Toma tu cruz y sígueme. Así de sencillos y profundos son mis diálogos con ell Espíritu Santo, momentos en qué hablo y lloro y otros en qué me río mucho. Sigamos
Hombres que dejaron mojones y señales para que otros sigan. Que marcaron generaciones selladas por el Espíritu Santo.
Hombres que traían lo divino del cielo a la tierra. Hombres llenos del Espíritu Santo.
Hombres que se negaron a si mismo para vivir a Cristo y revelar al Padre.
La palabra nos dice que esos hombres eran como nosotros, sujeto a pasiones, llenos de debilidades, errores e imperfecciones pero que tenían un deseo irrevocable de buscar a Dios, entonces esos hombres se convierten en una fuente de inspiración para nosotros.