Depender de Dios
Éxodo 16:1-21
Dios dijo en en los versos 4-5:
"Voy a hacer que del cielo les llueva comida todos los días, pero la gente recogerá solo lo necesario para cada día [...]".
El maná era la provisión de Dios, la contestación a su necesidad (y sus quejas) y, aunque el Señor proveía la comida, el pueblo tenía que recogerla. Esto conllevaba esfuerzo, además que la actividad diaria de recoger, medir y comer el maná servía como una lección de la dependencia diaria de Dios, quien, proporcionaba día a día una prueba de Su fidelidad.
Como vimos ayer, no es malo guardar para el, o los siguientes días, el problema es dejar de depender de Dios, pero no solo eso, sino también olvidar lo que Dios ha hecho por nosotros en el pasado.
Los israelitas habían visto hasta ahora muchas señales, pruebas del poder se Dios, las 10 plagas, como Dios los sacó de Egipto, como dividió el mar, como transformó el agua amarga en dulce, es decir, vieron tantas cosas, y cosas poderosas, grandes, pero, nada más tienen un problema y, como que se les olvidara con quien están.
Como siempre agrego, esto nos pasa a nosotros también, no lo podemos negar, se nos olvida que el mismo Dios que dividió el mar es el mismo Dios que tenemos, el Todopoderoso, el Omnipotente.
Aprendizaje:
- Aprendamos a depender de Dios
- A no olvidar lo que ha hecho por nosotros
- A nunca dejar de creer en Él
- Y que, aunque Él sea el proveedor, nosotros también debemos esforzarnos y ser valientes.
Dios te bendiga, y hasta el siguiente Devo 😊
#devocionaldiario