La identidad sonora desde la posproducción
Entrevista a Mónica Mendoza
En El Bache… Hablemos de radio hemos conversado de varios temas. Por ejemplo, la importancia de cultivar y entrenar nuestra voz como herramienta fundamental de comunicación. También sobre creatividad al momento de crear la publicidad radial. Sumamos conversaciones sobre cómo comercializar segundaje en la programación y cómo gestionar su emisión eficiente. Sumamos, además, que es importante definir la identidad de nuestra emisora para diferenciarse de la competencia.
Es aquí donde me gustaría detenerme: diferenciarme de la competencia. ¿Cómo? Pasamos también pasamos las mismas canciones, tenemos conductores con estilo de conducción similar y compartimos, obviamente, al mismo público objetivo. Por ende, los auspiciadores pueden ser los mismos rubros.
Hay una pieza clave que el público desconoce pero es vital para imprimir el sello de tu la identidad sonora de una emisora: la posproducción. Aquella ecualización para la voz marca, los efectos sonoros, ráfagas, golpes musicales, cortinas con el género definido. Tal vez una base de reggaeton, un batería y guitarra rockera, el repique del timbal y la campana de una salsa, o el característico bajo y trompeta de una buena cumbia. El dinamismo, velocidad y complejidad o sencillez solo se logran desde un proceso de edición y posproducción bien planteado y definido. No es solo un tema técnico. Es un tema artístico, también. Es un tema de comunicación.
Es por ello que en el episodio de hoy, en El Bache conversaremos con una comunicadora audiovisual, con diplomado en marketing digital. Tiene experiencia profesional en producción televisiva, en el área de marketing, en dirección de arte y como directora de producción. Actualmente es jefa de posproducción y calidad de audio de RPP. Hoy, en El Bache, Mónica Mendoza.
