Programación e identidad de una emisora
Entrevista a Víctor Tejada.
Algunas personas, quizás de una manera muy ligera —insolentes, dirían otros— afirman que una radio de formato musical es tan simple y fácil de gestionar como una playlist aleatoria de cualquier reproductor de música. Incluso, lo comparan con su app de streaming favorita. No afirmamos que es injusta la comparación, sino que no admite ninguna. Si bien una lista de reproducción te mantiene entretenido; la radio no solo hace eso, sino que crea un lazo particular con cada persona. Ahí radica su magia: se transmite para muchos pero conecta de manera personal según las vivencias de cada oyente.
La emisora adquiere una personalidad, se vuelve una entidad a la que el oyente recurre para que lo acompañe y entretenga. Pero esta personalidad o identidad de la emisora no se crea espontáneamente o de forma heterogénea durante las horas. Se construyó, incluso, antes del lanzamiento de la emisora. Será aquella personalidad de la radio la que lo diferencia de su competencia directa, por ejemplo.
Es así que surgen varias interrogantes. ¿Las canciones tienen que ser distintas para diferenciarse de la competencia? ¿Hay una fórmula ganadora? ¿Una vez que encontraste aquel ciclograma o cadencia ya no la debes cambiar o ajustar? ¿Cuán importante es la cantidad y duración de las intervenciones? ¿Se puede competir cuando hay diferencia de presupuesto?
Esta y otras interrogantes serán respondidas gracias a una conversación con una persona con décadas de experiencia en la radio comercial. Radialista desde adolescente desde su natal Trujillo y protagonista de la época de oro de la radio musical limeña, no solo como conductor, sino también como productor y desde hace un par de décadas como programador y líder de equipos exitosos como Radio La Inolvidable, por ejemplo. Publicista de formación, radialista de corazón y apasionado en su labor de mentoring. Hoy en El Bache… Víctor Tejada.