Listen

Description

Bienvenidos a disfrutar de un nuevo episodio de Catálogo Divino.

¡Qué sorpresas podemos encontrar en la vida de los santos!

Despierta admiración ver cómo los santos enfrentaban tantas luchas para mantenerse en sus principios.

Sobre todo, nos sorprende cómo vencieron en sus luchas con la ayuda de Dios.

Esto mismo nos puede suceder, si invocamos a Jesús en medio de nuestras dificultades.

Descubramos qué santos se recuerdan el día de hoy, para aprender de sus aventuras.

Los Santos venerados hoy, 25 de octubre son:

San Frutos de Segovia, eremita; San Bernardo Calbó, Obispo; San Crisanto de Roma, mártir, San Crispín y San Crispiniano de Soissons, mártires; San Frontón de Périgeux, Obispo; San Gaudencio de Brescia, Obispo; San Hilaro de Javols, obispo;

San Mauro de Pécs, abad y obispo; San Miniato de Florencia, mártir; San Valentín de Sevilla, mártir; Santa Daría de Roma, mártir; Santa Engracia de Segovia, mártir; Beato Recaredo Centelles, Abad y el Beato Tadeo Machar, obispo.

Hoy, tenemos en nuestro Catálogo Divino un hombre de leyes que dejó el mundo para vivir la vida religiosa y que luego de un gran servicio se dedicó a ser un santo obispo.

Él es San Bernardo Calbó.

Pidamos al Señor que al igual que a San Bernardo Calbó, seamos fieles en todas las circunstancias de nuestra vida:

¡Gracias, Señor, por tu fidelidad infinita, concédeme la gracia de serte siempre fiel, de amarte con todo mi corazón, con toda mi alma, con todo mi ser!

¡Envía tu Espíritu sobre mí, Señor, para que sea capaz de abrir el corazón y cambiar lo que deba ser cambiado, para abrir mi corazón en la oración y conocerte más, para aumentar mi deseo de amarte más, de tener una experiencia más consciente de Ti!

¡Señor, permíteme serte siempre fiel para adorarte en espíritu y en verdad para compartir con los demás tu amor, para sentir en mi propio corazón tu presencia, para perfeccionarme por medio de tu amor!

¡Y cuando no te sea fiel, Señor, endereza mi vida y enséñame por medio de tu Santo Espíritu a entregarme en cada momento de la jornada, a tener la certeza viva de tu presencia, de tu compañía y de tu protección! Amén.

La fidelidad implica algo más que la lealtad.

La lealtad se da cuando hay un beneficio o un acuerdo de por medio. Mientras que la fidelidad implica amor, aprecio por el otro.

Nos falta más fidelidad a Dios, porque nos falta amor: amor a nosotros mismos para cumplir la palabra dada y amor a Dios, a quien le reconocemos el bien inmenso que nos da.

Cuando se es fiel, se es responsable por hacer lo correcto y actuar de acuerdo a la verdad y al mismo tiempo, se establece un compromiso libre y profundo.

No actuemos por cumplimiento, sino por convicción.

San Bernardo Calbó,

Ruega por nosotros.