Listen

Description

Hoy es un gran día, porque nuestro primer pensamiento ha sido dar gracias a Dios por la vida que nos ha dado.

 

Y por las personas que llenan nuestra vida de amor y esperanza.

 

Seamos agradecidos con Dios por tantos bienes que nos da, así como los santos, que encontraron la ayuda del Señor, en sus bendiciones y en las manos amigas que los apoyaron en sus proyectos.

 

Entonces, bendigamos a Dios junto a los santos que se recuerdan en este día, 21 de marzo:

 

Ellos son:

 

San Nicolás de Flüe, padre de familia y anacoreta; San Agustín Zhao Rong, presbítero y mártir; San Endeo, abad; San Jacobo el Confesor, Mártir; San Juan de Valence, Abad y Obispo;

 

San Serapión el Escolástico, anacoreta; Santa Benita Cambiagio, esposa y fundadora; Beato Mateo Flathers, presbítero y mártir y Beato Tomás Pilchard, presbítero y mártir.

 

Hoy, conoceremos a una mujer que vivió la santidad tanto en la vida matrimonial como en la religiosa- y que de manera extraordinaria en la historia de la Iglesia,- una de sus grandes ayudas en sus proyectos fue su propio esposo.

 

Ella es Santa Benita Cambiagio Frassinello.

Oremos poniendo nuestra confianza en la Divina Providencia:

 

¡Confío plenamente en Ti, Señor, porque te haces presente en mi vida, porque solventas todo, porque me permites abrazarte para que me des la sabiduría y la fortaleza para solventar los problemas y las dificultades!

 

¡Confío en Ti, Señor, porque me permites abrir mi corazón en la oración y tener la certeza de que entregándome a tu misericordia y a tu amor todas las pruebas serán superadas, todas las dificultades vencidas y todos los temores disipados!

 

¡Te entrego mi vida, Señor, te doy mi pasado, mi presente y mi futuro para que hagas de mi un instrumento de tu misericordia! Amén.

 

Dios escribe derecho en renglones torcidos, dice el refrán.

 

En medio de las circunstancias confusas y dolorosas de la vida, nuestro deseo de proyectarnos y hacer el bien, puede verse perdido por tantas presiones y dificultades que aparecen.

 

Pero, Dios cuenta con nuestra humilde confianza en El.

 

Así su poder se muestra en nuestra vida y Él puede mostrar su gloria, concediéndonos aquello que necesitamos para alcanzar esas metas, mediante su misteriosa y divina providencia.

 

Confiemos plenamente, porque así conquistamos el corazón de Dios en nuestra ayuda.

 

Santa Benita Cambiagio Frassinello,

Ruega por nosotros.