Un saludo fraterno deseándoles que la luz de Cristo ilumine sus vidas y les dé confianza ante el futuro.
Pensar en Dios, nos ayuda a mantener la esperanza en que lo que hoy sembramos dará buenos frutos.
Los cristianos viven fortalecidos por la esperanza, saben que Cristo los respalda con su gracia.
Y ésta es una característica de los santos:
Pidamos a nuestros hermanos del cielo que nos ayuden a conservar siempre la esperanza.
Roguemos especialmente a los santos recordados por nuestra Iglesia en este 10 de mayo:
Algunos de ellos son:
San Cataldo, Obispo; San Alfio, Mártir; Beata Beatriz Atestina I de Este, Monja; San Cirino, Mártir; San Comgall,abad;
San Dioscórides de Mira, mártir; Beato Enrique Rebuschini, presbítero religioso; San Filadelfio, Mártir;
San Job, patriarca del antiguo testamento; San Juan de Ávila, presbítero; Santos Gordiano y Epímaco, Mártires;
San Guillermo de Pontoise, presbítero; Beato Nicolás Albergati, Obispo; Santos Cuarto y Quinto, Mártires y Santa Solange, Virgen y mártir
Hoy compartiremos la historia de un obispo irlandés que por un error se hizo muy famoso en Italia y por su intercesión muchas ciudades italianas han recibido su protección como patrono.
Conozcamos a San Cataldo.
Unámonos con esta fervorosa oración pidiendo los bienes necesarios por este santo intercesor:
Glorioso San Cataldo, nuestro Patrono y Protector, admiramos en ti la fuerza de la fe y el ardor misionero para difundirla y dar testimonio de ella, sin escatimar sacrificios y esfuerzos.
Consíguenos también a nosotros una fe gozosa y generosa para que Dios se convierta cada vez más en el único amor de nuestra vida.
Glorioso San Cataldo, nuestros padres te han invocado como escudo muy eficaz en las grandes calamidades y adversidades, especialmente guerras y terremotos, sequías y hambrunas y han experimentado siempre tu intercesión.
Por favor extiende esa protección a nuestros días también. Glorioso San Cataldo, continúa bendiciendo a nuestras familias y comunidad parroquial. Amén.
Es curioso cómo una gran cantidad de fieles han escogido a su patrón sin tener la certeza de la veracidad y confirmación de su historia .
Pero esto nos da pie para reflexionar acerca de nuestras devociones populares.
Una devoción popular es un afecto especial por una acción o persona que nos remite a Dios y sus enseñanzas.
Y este afecto, se expresa con la práctica de acciones externas de piedad, lo que conocemos popularmente como: novenas, peregrinaciones, oraciones, meditar ante una imagen que nos la representa, entre otras.
Muchas devociones han surgido por imitación de las prácticas de piedad realizadas por los religiosos, que cargadas de tantos símbolos y acciones sencillas se convirtieron en una manera accesible para catequizar a los fieles en algunos aspectos de la fe.
Es muy grande también el ingenio piadoso de los fieles que quieren representar lo que sus sentimientos religiosos les sugieren.
Sin embargo, hoy es necesario que además de estas devociones, también los católicos nos esmeremos por conocer el sentido de los signos que realizamos y de las oraciones que recitamos.
Es necesario para que, teniendo un conocimiento más profundo nos ayude a tener una fe más profunda, sólida y sobre todo, que nos ayude a tener una mejora en nuestro comportamiento y actitudes.
Eso es finalmente, lo que se espera que las prácticas de piedad logren en una persona: la vida de conversión que se espera de alguien que reza mucho y que asiste frecuentemente a la Iglesia.
No dejemos las oraciones personales; más bien, complementemos nuestra piedad, con más instrucción sobre nuestro catecismo…
… y sobre todo, cultivemos una devota lectura de la Palabra de Dios, para que nuestra fe nunca vacile.
San Cataldo,
Ruega por nosotros.