Santa Gertrudis Magna - 16 de noviembre
Religiosa
¡El amor del Señor es maravilloso! dice la canción.
¿Quieren conocer lo que puede hacer el Señor en la vida de alguien que lo deja actuar en su corazón?
¿Sí? Pues abramos nuestro catálogo divino, donde cada historia es un milagro del amor de Dios en el alma de un sincero católico.
Las historias de amor que nos presenta la Iglesia en este 16 de noviembre son:
Santa Margarita de Escocia, madre de familia y reina, San Edmundo Rich, obispo; San Euquerio de Lyon, monje y obispo; San Fidencio, obispo; San Otmaro de Suiza, abad; San Roque González y compañeros mártires.
Santa Gertrudis Magna, Monja; Santa Inés de Asís, monja; Santa Lucía de Narni, virgen; Beato Eduardo Osbaldeston, presbítero y mártir y Beato Simeón de Cava, abad.
Esta santa es la patrona de las personas místicas, porque ella fue la primera gran mística de quien se tenga historia… hoy conoceremos la historia de Santa Gertrudis magna.
Si el mandamiento máximo que gobierna a toda la humanidad es el Mandamiento del Amor: Amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a sí mismo… entonces, el sentido de nuestra fe y nuestra santidad depende de nuestra disponibilidad y capacidad de amar.
Pidamos con una bella plegaria de Santa Gertrudis que Dios haga nuestro corazón capaz de amar como Él lo merece:
"Por tu Corazón herido, querido Señor, traspasa el mío tan profundamente con el dardo de Tu amor, que ya no pueda más contener cosas terrenas, sino que sea gobernado tan sólo por la acción de Tu Divino amor. Amén"
Es hermoso comprender que el orden y la paz que mantiene en armonía todo el universo, viene de dejarse gobernar por el Corazón amantísimo y misericordioso de Dios.
Pues, venimos del amor de Dios y necesitamos permanecer en ese amor, para que haya vida en nosotros.
Lo que el mundo enseña que es el amor, es muy pobre y diferente a la experiencia verdadera de ser amado y rescatado por Dios.
Tener una probadita del amor de Dios, hace que volvamos a recordar nuestro origen en las manos creadoras de nuestro Padre y que le demos el lugar como Señor en nuestra vida, con una alegría tal, que cometer pecados y dejarse llevar por la maldad, se deja a un lado con mucha más facilidad.
Pregunten a quien lo ha vivido: es hermoso transformar la vida al estilo del Espíritu Santo, el amor divino que, con dulzura, nos enseña a vivir con dignidad, como hijos de Dios. Todos estamos llamados a hacerlo.
Pidamos a esta Santa, nos ayude a adorar a Dios en el corazón con tanta reverencia y ternura con ella lo hizo:
Santa Gertrudis,
Ruega por nosotros.
