Santos Áquila y Priscilla
Esposos, misioneros y mártires
¡¡Hoy es jueves!! Y tenemos la alegría de abrir nuevamente este catálogo divino, para seguir admirando la vida de los santos que se ganaron el cielo a punta de amor y sacrificio.
Y en este día 8 de julio, el catálogo divino nos viene a enriquecer con el testimonio de: San Procopio de Cesarea mártir, Beato Pedro Vigne Presbítero y Fundador, San Adriano III Papa, Santos Áquila y Priscilla Esposos Mártires, San Quiliano Obispo y Mártir, Beato Eugenio III Papa, y el beato Mancio Araki Mártir Laico.
Y, como el calendario litúrgico indica que una FERIA LIBRE, vamos a mover la ruleta para elegir al santo sobre el cual realizaremos nuestro programa.
¡vaya vaya! Hoy nos llega este catálogo por partida doble
¿si? ¿Y eso porqué?
Porque vamos a escuchar la historia de los santos Áquila y Priscilla, que fueron un matrimonio misionero santo y discípulos de San Pablo. Juntos, colaboraron en el crecimiento de la Iglesia primitiva.
Santos Áquila y Priscilla fueron un matrimonio judeo - cristiano, muy querido por el Apóstol San Pablo y fieles colaboradores en la propagación del Evangelio. Cuando San Pablo fue recibido en Corinto y hospedado por ellos en su casa, percibió en ellos grandes talentos.
Los esposos se convirtieron en sus discípulos. No se puede asegurar con certeza sobre en qué momento y lugar fueron martirizados Áquila y Priscilla, ya que las únicas fuentes en ellos son las Sagradas Escrituras. Se presumen que están muy relacionados con dos cuerpos enterrados en las catacumbas y que los dos murieron siendo decapitados.
Pidamos incesantemente la intercesión de estos santos, para que, animados por su testimonio, luchemos por alcanzar la santidad:
Santos Priscilla y Áquila, ustedes fueron uno de los primeros instrumentos que utilizó la Iglesia primitiva para alojar a la Palabra de Dios misionera. Acompañaron con valentía a San Pablo en sus muchos viajes, arriesgando sus propias vidas por el anuncio y la difusión de la Buena Nueva. Fueron un testimonio abierto del amor de Dios haciendo morada en el matrimonio cristiano. Sin tener miedo, hospedaron en su hogar al mismo Cristo, dando alojamiento a los Apóstoles del Señor. Rueguen por todas las parejas casadas, para que glorifiquen a Dios con sus vidas y sean ejemplos vivos de fe y confianza en el Señor. Que, como ustedes, también nosotros podamos servir a los demás en el espíritu de amistad y amor. Oh siervos de Dios, Santos Priscilla y Áquila, rueguen por todos los matrimonios del mundo. Hágannos recordar, que debemos abrir el corazón, mentes y nuestros hogares a Cristo Jesús, a través de cada uno de los misioneros que llevan la Palabra de Dios por todo el mundo. Amén.
Y con el corazón feliz, porque tiene una nueva misión, la misión de vivir en santidad, nos despedimos, recordándoles que las Hermanas Trovadoras los encomendamos en nuestras oraciones, para que nunca renuncien al noble propósito de la santidad.
Y pidiendo el amparo de estos santos, los invitamos a orar:
Santos Áquila y Priscilla
Rueguen por nosotros
