Desmond Tutu es un ejemplo del papel de la iglesia en tiempos de Opresión. Es una voz que se levantó para denunciar y señalar las injusticias de la opresión, la brutalidad del racismo, la devastación de una mirada excluyente de la vida en donde el otro y sus diferencias deben ser aplastados y silenciados. Un anti-Apartheid que nos sigue enseñando la obra de Dios en el clamor por libertad.
Murió, Desmpond Tutu murió pero dejó su voz que sigue viva, dejó su huella que nos sigue interpelando, dejó su carisma que nos sigue guiando. En tiempos de dificultad podemos, en la historia de vida de Tutu, recordar que Dios nos liberta. Nos impulsa a denunciar los regímenes que provocan malestar, nos llama a que anunciemos la esperanza.