Debes ser obediente y hacer el bien. Ambas cosas se llevan de la mano, la obediencia conlleva hacer el bien, tal y como lo vemos en múltiples historias de la biblia. Así como Jesús que en cada momento obedeció sabiendo que su propósito era mayor.
Los ojos del Señor están sobre los que hacen lo bueno, y sus oídos están abiertos a sus oraciones. Pero el Señor aparta su rostro de los que hacen lo malo».
1 Pedro 3:12 NTV