Lucas 15 nos revela el corazón del Padre que nunca deja de buscar a los suyos. Tres poderosas parábolas nos muestran que, no importa cuán lejos hayamos ido, siempre hay esperanza de volver. Este capítulo es un recordatorio de que el amor de Dios te espera con los brazos abiertos.
¿Cuál parábola tocó más tu corazón: la oveja, la moneda o el hijo pródigo? Comenta tu respuesta, visita nuestro perfil para más contenido que edifica y síguenos en Spotify y YouTube para seguir creciendo juntos.
