“pero ahora les dije: —Ustedes saben muy bien las dificultades en que estamos. Jerusalén yace en ruinas y sus puertas fue por fuego. ¡Reconstruyamos la muralla de e y pongamos fin a esta desgracia! Después les conté cómo la bondadosa mano de Dios estaba sobre mí, y acerca de mi conversación con el rey. De inmediato contestaron: —¡Sí, reconstruyamos la muralla! Así que comenzaron la buena obra.”
Nehemías 2:17-18 NTV
Cuando Nehemias escucho sobre la situación, el se lamentó,lloro, hizo duelo, pero también ayunó y oró. El se movió a la observación. verlo con sus ojos y llevo la preocupación a la acción.
Esto es precisamente lo que Dios está esperando de la iglesia. No basta con escuchar, observar y mantenerse preocupado. Necesitamos actuar.
Dios ama a su iglesia pero nuestro descuido e indiferencia, y comodidad ha llevado al oprobio que hoy estamos viviendo. Por esto es necesario reconocer que lo necesitamos a Él como Nehemías lo hizo