“Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;”
1 Pedro 2:9 RVR1960
Hemos sido escogidos por Dios como su propiedad, y hemos sido llamados a representarlo delante de otros. Somos valiosos por lo que Dios hace y no por lo que nosotros hemos hecho o logrado.
El pueblo de Israel fue escogido por Dios no por méritos propios sino por la fidelidad de Dios a su promesa hecho a sus antepasados. Así mismo nos escogió a nosotros agá ser su posesión más preciada. Somos su pueblo Santo y bendito, su especial tesoro único y especial.