Un Pump Track es, en un contexto deportivo, un circuito, generalmente de pequeñas dimensiones, el cual podemos recorrer completamente con un monopatín sin impulsarse con el pie o con una bicicleta sin la necesidad de dar pedales;[1][2] impulsándonos solamente mediante la inercia adquirida en los saltos y peraltes del circuito y la propia habilidad del skater o ciclista.