Estamos tan acostumbrados a escuchar divorcio y pensar en tragedia, caos, pleitos, decepción y obviamente fracaso; sin embargo bajo nuestra propia experiencia podemos compartir el otro lado cuando lo vives de manera distinta, cuando ya lo asimilaste, lo superaste y te das cuenta que más allá de todo lo que se piensa, es más un acto de valor y de amor propio que te hace crecer como ser humano, que logras reconectar contigo y mejoras la relación a tu alrededor.