Como mamás, no queremos que nuestros hijos pierdan ninguna oportunidad, que desarrollen todas las destrezas posibles, que realicen cada uno de sus sueños y que no les falte nada. Sin embargo, en el camino les quitamos la oportunidad de ser niños. Nosotras mismas nos perdemos la oportunidad de conocer sus sueños y lo que piensan, ahogamos su capacidad de asombro y nos llenamos de tantas actividades como familia que muchas veces se nos olvida disfrutar. Cuán importante es que evaluemos qué es exactamente lo que nuestros hijos necesitan, lo que queremos desarrollar en ellos y sobre todo, los valores que son importantes en nuestra familia.