Olga no sólo estudiaba con su hermano, también le enseñaba muchas otras cosas, insistía en corregir su postura y sus movimientos haciéndolo ver como un niño normal. ¿Quieres saber como continúa esta sorprendente historia? No te pierdas este espisodio de Sacrificio del alma, un amor a través de la vida y el tiempo por Rubén Sobrino Prado.