Listen

Description

El enemigo te hace pensar mal de los demás aún cuando no es verdad.

Hemos visto en nuestras clases de MidaD que nadie vino a este mundo por casualidad, Dios nos mandó para cumplir con una misión. Y esa misión depende del propósito de la vida que se aplica a todos y ella es: VENIMOS A ESTE MUNDO PARA SER FELICES HACIENDO FELICES A LOS DEMÁS CON LOS TALENTOS QUE DIOS NOS DIO.

nadie vino a vivir o trabajar solo/a, Dios nos puso en parejas, en grupos y sobre todo en comunidades para cumplir con esa misión. Todos juntos logramos fincar el reino de Dios que quiere que finquemos. Por eso Dios quiere que vivamos en unión, en amor, en respeto y tolerándonos unos a otros con nuestros defectos pues todos tenemos defectos,

Hay personas a las que los junta más Dios para hacer su obra y entonces tenemos que el diablo, el enemigo, sabiendo cual es el propósito de Dios de usarlos como fuerza, trata de separarlos para que no tengan la misma fuerza.

Si tú ya estás en el camino de servicio a Dios hay personas a tu lado que Dios puso para que lo sirviéramos mejor.

Una forma en que el enemigo nos quiere dividir es tratando de que comencemos a desconfiar uno del otro. A veces con malos entendidos, o metiéndonos ideas a la cabeza de que la otra persona no es tan buena como tú creías, o que tiene malas intenciones aunque esto sea falso, o haciéndote ver cosas buenas como malas, o haciendo que te impacienten los defectos del otro, o exagerándolos en tu mente, o haciéndote ver que la otra persona tiene malas intenciones cuando en realidad solo tiene debilidades.

Un ejemplo es: la otra persona te saluda y el diablo te dice en tu mente, no te creas que se preocupa por ti. Te saluda para tantearte, para ver si le haces un favor que luego te quiere pedir. ¿Recuerdas que ayer le pediste un favor y no te lo hizo? Ya ves, no te quiere… (tal vez a la otra persona se le olvidó porque andaba muy ocupada, o trató pero no pudo, o lo está haciendo sin que te des cuenta pero el enemigo ya te está metiendo la desconfianza de la otra persona).

Col 3:12 Por lo tanto,  como escogidos de Dios,  santos y amados,  vístanse de afecto entrañable y de bondad,  humildad,  amabilidad y paciencia,

Col 3:13 de modo que se toleren unos a otros y se perdonen si alguno tiene queja contra otro.  Así como el Señor los perdonó,  perdonen también ustedes.

Col 3:14 Por encima de todo,  vístanse de amor,  que es el vínculo perfecto.

Col 3:15 Que gobierne en sus corazones la paz de Cristo,  a la cual fueron llamados en un solo cuerpo.  Y sean agradecidos.

Joh 17:20 "No ruego sólo por éstos.  Ruego también por los que han de creer en mí por el mensaje de ellos, (por la iglesia que vendrá)

Joh 17:21 para que todos sean uno.  Padre,  así como tú estás en mí y yo en ti,  permite que ellos también estén en nosotros,  para que el mundo crea que tú me has enviado.