Capítulo 20: DEL AMOR A LA SOLEDAD Y AL SILENCIO
Por la misma adicción a las pantallas, mucha gente ya no se da momentos de soledad y de silencio; momentos para poder encontrarnos con nosotros mismos y con Dios en nuestro interior. Ya no tenemos tiempo para esas citas de amor con el que más nos ama en este mundo.
1. Busca tiempo a propósito para estar contigo y piensa a menudo en las beneficios de Dios.
Si te apartares de conversaciones superfluas y de andar ocioso y de oír noticias y murmuraciones, hallarás tiempo suficiente para entregarte a santas meditaciones.
Hoy diríamos: Si dejaras el teléfono, las redes sociales y las pantallas hallarías tiempo suficiente para pasar momentos de compartir y de amor con la familia y con Dios.
Los mayores Santos evitaban cuanto podían la compañía de los hombres, y elegían el vivir para Dios en su retiro.
Hoy tenemos que evitar la compañía constante de las pantallas y de tantas distracciones.
Por esto, al que quiere llegar a las cosas interiores y espirituales le conviene apartarse seguido de la gente para estar con Jesús.
