Te mando mi carta semanal a la hora de siempre y el día de siempre. Pero te pido que no tengas prisa en leerla. Y te doy la mejor receta para parar el tiempo: preparar el café en una máquina italiana. Mira el fuego. ¿Tienes prisa? El fuego no.
Hay un patio en El Puerto de Santa María en el que han aprendido a embridar el tiempo. Volvemos a TohQa, a aprender sobre sabor y textura. Dale a Edu un cuchillo para que le saque el alma a todo lo vivo y te lo explique.