La muerte ha dejado de ser un diálogo íntimo ahora que toda la memoria es como una colmena. Mi carta es un agradecimiento a los muertos recientes, por regar los recuerdos compartidos.
No es una mudanza como tal, pero si que es un gran salto. El equipo que triunfó en Arima ha abierto BASCOAT y en su nueva casa despliegan una cocina sobresaliente. La gilda es lo de menos. Yo quiero ahora mismo la merluza.