🔊📖🐔 EL CANTO DEL GALLO
🗓️ 23/12/2023
SERIE: SÁBADOS DE CAMBIO ↪️
Título: ME CLAVASTE EL VISTO
En este tiempo donde las comunicaciones avanzan cada día más rápidas, el ser humano se ha volcado hacia mensajes a través de grupos de WhatsApp. Grupo del equipo de pastores, del ministerio, de la alarma vecinal, del grupo de los padres de la escuela, obviamente el grupo de la familia y un sin número más de mensajes sin pertenecer a grupos. ¿Has visto tu celular y contemplado cuantos contactos tienes? ¿Y la cantidad de grupos? Te llegan muchos mensajes y solo hacemos una cosa “clavamos el visto” porque decimos “no tenemos tiempo para contestar todo”. Y el otro se queda esperando la respuesta que, por supuesto, nunca llega.
Creo que esto mismo nos ha pasado con la Palabra de Dios. Le clavamos el visto como diciendo eso ya lo sé. Pero Dios desea que le contestemos como lo expresa Isaías “Heme aquí” sin clavar el visto (Isaías 6.8)
Él quiere que tengamos un permanente ida y vuelta. Él por ejemplo espera que clamemos para enseñarnos y nos (Jeremías 33.3) dijo “Clama a mí y yo te responderé…” ¡Tremendo! Él desea enseñarnos cosas grandes y ocultas que no conocemos, pero en vez de clamar… clavamos el visto.
Él nos dio una Palabra para proclamar el evangelio de la Salvación y nos dijo: Id y predicad el evangelio a toda criatura, enseñándoles y bautizándolos. (Mateo 28.19-20) Y le clavamos el visto. Es como que le dijéramos: Sí Señor lo hare” pero hacemos como los siervos que fueron buscados y pusieron excusas, compré tierras, compré bueyes, que me casé y no vamos (Lucas 14.16-22) clavamos el visto porque todo es más importante… que seguir al Señor.
¿Te has dado cuenta que no aprovechamos bien el tiempo? (Efesios 5.16) Es decir, no ordenamos nuestras vidas para realizar la obra a la que Él nos ha llamado. Excusas siempre sobran. Pero cuando viene el pastor, anciano o líder ahí sí estamos presentes, ahí sí respondemos, ahí sí no clavamos el visto. ¿Será que deseamos que ellos al no ver nuestro “visto” nos tengan en cuenta para lograr algún lugar de importancia que deseamos?
El predicar el evangelio es escribir en corazones destruidos, necesitados de amor, gente que nos grita desde el mismo infierno que desean salir. El predicar el evangelio no es clavar el visto al necesitado sino ponernos en sus zapatos como dice mateo 25 estuve enfermo, con hambre, necesitado, en la cárcel y te has dado cuenta de la necesidad de actuar y tender la mano. En la medida que lo hiciste por uno de ellos a mí me lo hiciste dijo el Señor (Mateo 25.34-40).
“Clavarle el visto” es decirles a las personas voy a orar para que tengas lo que necesitas, pero no le brindamos lo que necesitan, aunque lo tengamos. Es estar con la viuda y el adicto. En 1 Juan 3.17 nos dice “Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener necesidad, y cierra contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él?”
No debemos “clavar el visto” a llevar la cruz, sino llevar la cruz sin importarnos quien es la persona que está necesitada. No debemos vivir una vida cristiana sin mostrar el amor del Señor, sin mostrar el sacrificio que hizo, sin importar los tiempos. Debemos pensar que cada vez que actuamos como nuestro salvador es que andamos sobre sus pisadas (1 Pedro 2.21) y ¿Dónde termina? Entregando la vida si es necesario (Hebreos 12.4) para que muchos puedan creer en quien nos dio vida.
Por eso hoy el Señor no te pide que le “claves el visto” sino que seas obediente a su mandato.
Adrián Malla – Centro Cristiano Familiar – La Rioja
🎶🎵 Tú Corazón En Mi (Kelly Spyker)