La vez pasada hablamos acerca de entregarle toda nuestra ansiedad al Señor y de las formas en las que el enemigo ataca y cómo podemos resistirle permaneciendo firmes en la fe. Hoy vamos a profundizar en qué es ser sobrios y qué es velar porque es necesario reconocer si nuestra vida esta caracterizada por la sobriedad y el ser vigilantes.