Ciento de personas viven en prisiones de oscuridad por causa de un incorrecto entendimiento de perdón, sin paz y sin esperanza en sus vidas. Quienes han puesto su confianza en Jesucristo, han sido perdonados de forma completa, no hay condenación, Dios nunca más traerá a su vida el reproche por un pecado cometido. De la misma manera en que Dios no amó y perdonó, estamos llamados a amar y perdonar.