Después de prepararnos meses para un parto en casa, la vida nos propuso un plan muy distinto. El tenerlo en el hospital no fue lo que me ha costado. Tuve un desgarre grado tres que produjo un hematoma que me ha tenido en cama casi un mes. Enfocarme en todos las bendiciones que tengo, todo lo mágico del parto y no dudar que lo “difícil” siempre es por un bien mayor, es de lo que me he agarrado para transitar este periodo retador mientras me recupero al 100. Les cuento un poquito de todo el proceso en este episodio.