Mateo 15:30-31 (NVI)
30 Se acercaron grandes multitudes que llevaban cojos, ciegos, lisiados, mudos y muchos enfermos más; los pusieron a sus pies y él los sanó. 31 La gente se asombraba al ver a los mudos hablar, a los lisiados recobrar la salud, a los cojos andar y a los ciegos ver. Y alababan al Dios de Israel.
Salmos 136:1-26 (NVI)
1 Den gracias al SEÑOR, porque él es bueno;su gran amor perdura para siempre
2 Den gracias al Dios de dioses;su gran amor perdura para siempre.
3 Den gracias al Señor de los señores;su gran amor perdura para siempre.
4 Al único que hace grandes maravillas;su gran amor perdura para siempre.
5 Al que con inteligencia hizo los cielos;su gran amor perdura para siempre.
6 Al que expandió la tierra sobre las aguas;su gran amor perdura para siempre.
7 Al que hizo las grandes lumbreras;su gran amor perdura para siempre.
8 El sol, para gobernar el día;su gran amor perdura para siempre.
9 La luna y las estrellas, para gobernar la noche;su gran amor perdura para siempre.
10 Al que hirió a los primogénitos de Egipto;su gran amor perdura para siempre.
11 Al que sacó de Egipto a Israel;su gran amor perdura para siempre.
12 Con mano poderosa y con brazo extendido;su gran amor perdura para siempre.
13 Al que partió en dos el mar Rojo;su gran amor perdura para siempre.
14 Y por en medio hizo cruzar a Israel;su gran amor perdura para siempre.
15 Pero hundió en el mar Rojo al faraón y a su ejército;su gran amor perdura para siempre.
16 Al que guio a su pueblo por el desierto;su gran amor perdura para siempre.
17 Al que hirió de muerte a grandes reyes;su gran amor perdura para siempre.
18 Al que a reyes poderosos les quitó la vida;su gran amor perdura para siempre.
19 A Sijón, el rey amorreo;su gran amor perdura para siempre.
20 A Og, el rey de Basán;su gran amor perdura para siempre.
21 Cuyas tierras entregó como herencia;su gran amor perdura para siempre.
22 Como herencia para su siervo Israel;su gran amor perdura para siempre.
23 Al que nunca nos olvida, aunque estemos humillados;su gran amor perdura para siempre.
24 Al que nos libró de nuestros adversarios;su gran amor perdura para siempre.
25 Al que alimenta a todo ser viviente;su gran amor perdura para siempre.
26 ¡Den gracias al Dios de los cielos!¡Su gran amor perdura para siempre!
2 Corintios 1:20 (NVI)
20 Todas las promesas que ha hecho Dios son «sí» en Cristo. Así que por medio de Cristo respondemos «amén» para la gloria de Dios.