Miércoles 05/Octubre/2022
Devocional Mi tiempo con Dios
"Preocuparse menos"
Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal. (Mateo 6:34)
Hay una unción (la presencia y el poder de Dios) hoy. En Juan 8:58, Jesús se refirió a sí mismo como el “YO SOY”. Si tú y yo, como Sus discípulos, tratamos de vivir en el pasado o en el futuro, nos va a resultar difícil la vida porque Jesús siempre está en el presente.
Jesús nos ha dicho claramente que no tenemos que preocuparnos por nada. Todo lo que tenemos que hacer es buscarlo a Él y a Sus caminos, y Él nos añadirá todo lo que necesitemos, ya sea alimento, vestido, refugio o crecimiento espiritual (Mateo 6:25–33). No tenemos que preocuparnos por el mañana. En cambio, podemos concentrarnos en el día de hoy y agradecer a Dios por las bendiciones de hoy.
¡Cálmate y relájate! Ríete más y preocúpate menos. No arruines el hoy preocupándote por el ayer o el mañana, ninguno de los cuales puedes hacer al respecto. ¡Disfruta hoy mientras puedas!
Oración diaria: Estoy agradecido, Padre, por este día que me has dado. Con Tu ayuda voy a vivir en el presente, no en el pasado ni en el futuro. Te agradezco por lo que tienes reservado para mí hoy. Y a veces aunque me siento agotado, cansado y abrumado por la preocupación, el estrés y la ansiedad por el futuro se que puedo orar por Tu promesa de provisión y cuidado. Y por ello, No quiero preocuparme o estar ansioso por el mañana, sino que quiero poner mi confianza en Ti completamente cada día. Por eso Padre, ay a recordar en tiempos de necesidad que Tú siempre has sido fiel para proveer en cualquier situación o desafío. Ayúdame a recordar que Tus planes son para prosperar, y nunca para perjudicarme. Padre, enséñame a enfrentarme a los problemas de cada día con gracia, sabiduría, conocimiento y comprensión. Sé que Tu gracia es suficiente. Tú me ayudarás a superar todo lo que esta vida me traiga. Eres muy bueno conmigo, y encuentro paz y esperanza al saber que nunca me abandonarás. No hay necesidad de preocuparse por el mañana, sé que Tú me encontrarás allí.