El trabajo te mata,el trabajo te enferma! Son las típicas frases de los que con 40 años siguen viviendo en casa de sus padres y a costa de la empresa familiar, ignorando por completo que cuando se levantan a desayunar, hay personas que ya han cumplido un turno de trabajo, para que ellos puedan llenar el buche con las comidas que tan apáticamente se tragan. Lo que también ignoran es que su holgazaneria, les pasará factura antes que a los que preparan su comida, o a los que limpian sus miserias.