Menudo lío han montado los apadrinados de la ganadería Intensiva por las declaraciones del Ministro de Consumo, el señor Alberto Garzón, al que le vengo despellejando desde el principio, por gastar dineradas de la caja del Estado en campañas de tres al cuarto. En este caso, tiene razón en lo que dijo, pero lamentablemente, han sacado de contexto lo dicho por el ministro, y los ganaderos piden su dimisión por temor a que se les acabe el negocio de las vacas gordas.