NO BUSQUES CONFLICTOS - Se ha vuelto cliché citar el discurso de Theodore Rooselvelt "Hombre en la arena", que celebra "al hombre[...] con el rostro desfigurado por el polvo, sudor y sangre; al que se esfuerza valientemente ", a diferencia de aquel que permanece al margen. Rooselvelt pronunció este discurso poco antes de dejar el cargo, en la cima de su popularidad. Un par de años despues, se enfrento a su antiguo protegido en un intento por regresar a Casa Blanca, pero perdió por mucho y casi muere asesinado en el proceso. También casi muere explorando el Amazonas, mato a miles de animales durante safaris en África y lecrogo a Woodrow Wilson que le permitiera enlistarse en la Primera Guerra Mundial, pese a tener 59 años de edad. Hizo muchas cosas que, en retrospectiva, son desconcertantes. Theodore Rooselvelt fue un gran hombre. Sin embargo, también lo motivaba una compulsión, una adicción al trabajo y la actividad que parecía inagotable. Muchos compartimos ese mal: que nos impulse algo que no podemos controlar. Tememos quedarnos quietos así que buscamos el conflicto y la acción a modo de distracción. Elegimos estar en guerra - en algunos casos de forma literal - cuando, de hecho, la paz es una alternativa mucho más honorable y adecuada. Si, el hombre en la arena es admirable, al igual que el soldado, el político, la mujer de negocios y todas las demás profesiones. Pero - y éste es un gran pero - solo si estamos en la arena por los motivos correctos. Tomado del Libro Estoicismo Cotidiano de Ryan Holiday y Stephen Hanselman, página 58. Sígueme en mis redes sociales en facebook.com/librosparacrecerenlavida o instagram.com/libros_para_crecer o youtube.com/hectormibanez o youtube.com/librosparacrecer. Bendiciones!! #estoicismo #librosparacrecer #hectormibanez