Jn 8,12-20: Yo soy la luz del mundo
Audio y edición: P.Cristovo, svd - musica: En nuestra oscuridad Cantos de Taizé. Texto: SBLA.
Juan presenta a Jesús como la luz del mundo. ¿Esto qué significa? Para la comunidad del cuarto Evangelio, el mundo en su totalidad yacía en tinieblas a causa del pecado, la injustica, la violencia provocada por el egoísmo personal y de las instituciones. Ni siquiera la Ley antigua, -por sagrada- ni las más hermosas tradiciones centenarias habían posibilitado la iluminación de las personas. Todo cuanto habían hecho a lo largo de la vida y lo acuñado hasta entonces había generado tinieblas. Es entonces cuando la experiencia de vida y de fe que Jesús ofrece relativiza todas las tradiciones y prácticas más antiguas del pueblo. Será solo la adhesión a la persona de Jesús, el seguimiento de su persona y el proseguimiento de su causa lo que dará la plena iluminación. Cada creyente está invitado a aceptar y recibir a Jesús como la Luz verdadera. Pero el compromiso ha de ser mayor: quien acepta a Jesús como luz está llamado a ser luz y a irradiarla al mundo. ¡Esta es una tarea que no da espera!