En ésta lección aprenderemos a crecer como personas para poder interactuar sabiamente dentro del círculo familiar. Declaramos que donde hay familias heridas, peleadas o destruidas, cualquiera sea la razón ahora comienza un tiempo de sanidad personal, sanidad de las relaciones familiares, tiempo de activar el perdón de Dios y de recuperar los lazos afectivos perdidos.
Entendemos como familia todo núcleo dónde conviven personas unidas por sangre o legalmente, ya sea la fámilia clásica, ensamblada o monoparental. Casi todas las familias tienen problemas y en ocasiones suelen durar años, ocasionando angustia, bronca, peleas, situaciones incómodas y tristeza profunda que afectan en diferentes áreas a una persona involucrada en la situación.
Las razones de las peleas familiares pueden ser varias: ya sea por padres que prefirieron más a un hermano que otro, entre hermanos por malos entendidos, competencia, envidia, etc., por un tema de repartición de herencia, por préstamo de dinero que no fue devuelto, por no aceptar a la pareja elegida por un miembro de la familia, por sentirse rechazados en alguna ocasión, por decisiones que no coinciden con el criterio general de la familia, etc.
Dios ama nuestra familia y es su plan el bienestar y que nos desempeñemos dentro de relaciones sanas en nuestro hogar. Dios te bendiga !!
