Así como en el área del cuerpo y la salud y en el área financiera, también podemos vivir en sobreabundancia en las áreas emocional y relacional las cuales están intrínsecamente relacionadas.
Estas dos áreas son determinantes para nuestra felicidad, en otras palabras no se puede ser feliz viviendo una vida de amargura, tristeza, soledad, sentimiento de rechazo, ira, violencia de cualquier tipo, etc. No trabajar nuestra vida emocional sería como enterrar nuestros talentos, tal como esas personas que dicen frases como: que me aguanten así, o yo nací así y no voy a cambiar, etc. Crece en la gestión de tus emociones y te relacionarás mucho mejor contigo mismo y con los demás. Es que para todo en nuestra vida se necesita de la habilidad para relacionarnos con otras personas, de hecho nada de lo que hacemos lo hacemos solos, sino que desde que llegamos a este mundo hemos necesitado de la ayuda de otras personas y para cumplir nuestro propósito necesitaremos de personas. Saber identificar a las personas correctas y saber relacionarse correctamente y lo que es más saber gestionar nuestras emociones para hacerlo exitosamente es una gran bendición.
El problema está en que aún aprendiendo formas correctas de relacionarnos nos cuesta ponerlas en práctica, esto se debe a que somos seres emocionales y reaccionamos y nos relacionamos con otros de acuerdo a lo que sentimos.
Para los años 1995 el Psicólogo y periodista estadounidense Daniel Goleman desarrolló el concepto de inteligencia emocional con gran éxito. La misma propone la gestión de nuestras emociones y la interpretación de nuestras emociones y las de las personas de nuestro entorno, logrando ser este método muy útil para muchas personas. Sin embargo, hay cosas que no se pueden cambiar en nuestras vidas sin el milagro del Espíritu Santo.
¡¡Te Invitamos a escuchar el mensaje completo, Dios te Bendiga!!
Pastores Juan Manuel y Nerina Curbelo.