No todos tenemos un espíritu emprendedor, sin embargo creo que todos somos capaces de hacerlo, se necesita de mucha determinación, seguridad pero sobre todo persistencia. Tal vez no todo salga a la primera, pero la realidad es que para decir que algo funciono o fue un éxito mínimo hay que intentarlo. Este es un episodio para recordarte que si te fijas una meta y trabajas por ella, tal vez tus objetivos se puedan alcanzar.