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Promesas de Dios

Existen, herramientas espirituales para simplificar el agobio.

Creo, que uno de los momentos mas Divinos de cualquiera es cuando nos convertimos en vocero de Dios que por definición, es convertirse en pescadores de hombre; pero, es un trabajo que se necesita tener bien definido lo que es El Fruto del Espíritu en nosotros porque, a veces se convierte en un trabajo agobiante que en el Antiguo como en nuestro propio idioma significa extenuar o acabarse en este caso  en específico la paciencia, como lo dice Lucas18:5 “sin embargo, porque esta viuda me es molesta, le haré justicia, no sea que viniendo de continuo, me acabe la paciencia” pero, pero la paciencia solamente se acaba cuando estas extenuado o cansado de algo al punto tal que nos lleva al agobio. Pero, cuando existe es algo que podemos y tenemos que luchar porque no puede llevar a la frustración camino al pecado.

No es mentira, el agobio nos puede frustrar cuando nos afanamos por no conocer nuestras limitaciones y debilidades a la hora de obrar, inclusive de como nos sentimos emocionalmente que nos lleva a obviar algo que existe en nosotros y que muchos no acabamos de entender; y es, el conocimiento sobre La Palabra de Dios que nos da respuesta y que, lo único que se necesita es escudriñarla; y aprender, cuando La Propia Palabra nos confronta, para poder ver lo que Ella nos quiere decir: cuidado, porque cuando no vemos, es porque nuestra mente está bloqueada, porque hay algo en lo que hacemos que no está funcionando y no concuerda con lo que La Palabra nos quiere decir. Eso, es peligroso porque al no rectificar nuestro desvió, porque no queremos o porque no nos conviene nos convertimos en pecadores que seria la consecuencia de estar agobiado por la mala administración de nuestros actos o actitudes que nos puede llevar a la frustración donde la consecuencia como se dijo sería el pecado.

Cuando, el agobio produce frustración producto del dolor emocional que tenemos a causa del esfuerzo que hacemos en algo, es importante reconocer no solamente que nos puede quitar el gozo; sino ver, como podríamos estar para poder llevarle el gozo que Dios nos dio a otros; y reconocer esto, es importante porque es la única manera que tenemos de poder llevarle La Paz de Dios a otros corazones: además, de poder tenerla en nosotros recuerda que, nadie podrá dar lo que no tiene y a pesar de que sabemos que la tenemos no poderla pasar.

Al mismo tiempo, que tenemos que reconocer de que Dios es Dios, y de que Dios quiere ser El Dios de nuestras vidas, tenemos que a prender a reconocer que el bien y el mal son diametralmente opuestos; que nos recuerda esto, la acción de Eva y Adán pero además, que nos enseña esto: que estamos en otra dispensación La de Gracia que hace más sabio, y no por nosotros sino porque tenemos a nuestra disposición La Voz de Dios a través de Su Palabra.

Dios, te siga bendiciendo grande y ricamente.