Antes estábamos muertos en pecado, ahora estamos muertos al pecado, antes éramos carnales ahora somos espirituales, antes teníamos la imagen caída de Adán y su pecado ahora tenemos la imagen de Cristo y su justicia en nuestras vidas.
Antes temíamos y esperábamos juicio ahora esperamos gracia y gloria, esto y mucho mas es lo que hace el ministerio del espíritu bajo el nuevo Pacto a través de su palabra que con su doble filo bendice nuestras vidas.