“…el Padre celestial sabe que ustedes las necesitan. Más bien, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas.” (Mateo 6:32 y 33)
Jesús nos llama a la calma, desafiándonos “Tu Padre celestial ya conoce todas tus necesidades. Entonces busca el Reino de Dios por encima de todo y viví con rectitud, y él te dará todo lo que necesites”.
Busca primero el reino de la riqueza, y te preocuparás por cada peso o dólar. Busca primero el reino de la salud, y vas a sudar por cada dolor y bulto que veas en tu cuerpo. Busca primero el reino de la popularidad y revivirás una y otra vez cada fracaso. Busca primero el reino de la seguridad, y saltarás del barco ante cada salpicadura del agua.
¡Pero si buscas primero su reino, seguramente lo vas a encontrar! Dios satisface las necesidades diarias, todos los días, diariamente. Ni semanal ni anualmente. Él te va a dar lo que necesites cuando sea necesario. Hebreos 4:16 dice: “Acerquémonos confiadamente al trono de nuestro Dios misericordioso, donde podamos recibir misericordia y en su gracia hallar oportuna ayuda”.
¡Que Dios sea suficiente!