El pueblo cristiano no está exento de cometer este grave error de hacer acepción de personas y esto producto de la falta de discernimiento espiritual que les lleva actuar deliberadamente conforme a sus intereses y percepciones según su razonamiento humano haciéndolo desobediente a la perfecta voluntad de Dios(debemos recordar que somos siervos de Dios y no nos pertenecemos a nosotros mismos), 1 Samuel 16:6-7 “Y aconteció que cuando ellos vinieron, él vio a Eliab, y dijo: De cierto delante de Jehová está su ungido. Y Jehová respondió a Samuel: No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón”.