Te debo haberme devuelto la ilusión por ilusionarme de nuevo… te debo tres o cuatro cerves y cinco o seis charlas hablando de todo y de nada en mi sofá…
Un paseo por el parque de mi pueblo contemplando las estrellas… dos cines y tres o cuatro macd… … abrazarte por detrás mientras contemplamos los fuegos en El Pilar…
Te debo cosas materiales e inmateriales…
Te debo un abrazo y un beso en la frente como buenas amigas… y un besazo empotrada contra la pared… meterte mano y sentir tu humedad entre mis dedos, mientras me resbalo poco a poco por tu sexo…
Reírnos a carcajada limpia en una guerra de almohadas… discutir por todo y nada y reconciliarnos en una guerra de besos eternos…
Te debo dormir abrazadas, sentir tu respiración acompasada… orgasmos sincronizados… besos milimetrados, tiernos, pausados, lentos… y cargados de mil de sexualidad explotando…