Hoy, te traigo la segunda parte de este episodio práctico, para que puedas superar tus dudas e inseguridades. Un episodio que te ayudará a comprender por qué nos sucede esto y qué medidas tomar para cambiarlo.
Aquí te dejo las preguntas que hemos visto en este episodio y que te ayudarán a integrarlo y ponerlo en práctica. ¡Un abrazo!
Preguntas
¿Realmente es algo negativo sentir dudas? Dudar de si mism@ o dudar de las situaciones puede ser un indicador de que hay algo que nos hace falta, ya sea, experiencia, un conocimiento en concreto o algún recurso en particular.
Y si en vez de huir del miedo y escapar de las dudas nos sentamos a reflexionar podríamos darnos cuenta de que esa dudas solo están para decirnos que hay algo que podemos mejorar o aprender.
Entonces mi consejo para ti es que escribas lo siguiente:
- ¿Qué quieres conseguir?
- ¿Cuáles son las dudas que tienes acerca de ello?
- ¿Por qué motivo tienes esas dudas?
- ¿Te están alertando de algo en particular?
- ¿Qué puedes hacer para derribar esas dudas?
(En el episodio vemos cómo se aplican estas preguntas en la práctica)
Una vez hecho esto, observa tu pasado como aprendizaje y reflexiona en lo siguiente:
- ¿En qué ocasiones has dudado de ti?
- ¿Has conseguido superar esas dudas?
- ¿Cómo lo has conseguido?
- ¿Qué te ha ayudado en el pasado a superar los momentos de dificultad?
- ¿Te ha ayudado hacer una formación?
- ¿Te ha ayudado un libro que trata esta temática?
- ¿Te ha ayudado a cambiar tu diálogo interno?
- ¿Qué creencias tenías cuando en el pasado has tenido dudas y cómo has conseguido cambiarlas o superarlas?
- ¿Te ha ayudado tener más energía y motivación?
- ¿Cómo has conseguido en el pasado tener fuerza, energía o motivación?
- ¿Cómo podrías replicar esa actitud ahora?
Una vez que te tomes el tiempo para hacer este ejercicio, te sentirás mucho mejor y es allí cuando podemos seguir avanzando para finalmente tener claridad.
Para poder avanzar hacia aquello que queremos necesitamos tener claridad. Por eso te propongo que reflexiones en lo siguiente:
- ¿Hay alguna habilidad o conocimiento que te ayudaría a avanzar?
- ¿Hay algún libro que te sería de ayuda?
- ¿Hay un mentor o persona conocida/ familiar/ amigo que podría ayudarte con su experiencia?
- ¿Qué tipos de pensamientos y creencias tiene una persona que ha conseguido lo que quiero conseguir?
- ¿Qué tipos de pensamientos y creencias tienes acerca de aquello que quieres conseguir?
- ¿En qué se diferencia el modo que tienes de pensar con el modo que tiene de pensar una persona que consigue resultados?
- ¿Y en la actitud?
Estas preguntas te ayudarán a tener un panorama más amplio, claro y objetivo de tu situación.
Por último, crea un plan, aunque sea rústico y anota cuál es el primer paso que puedes dar.
Este primer paso no tiene por qué ser enorme.
Una vez hecho esto, tómate un tiempo para ir asimilando todo y ve perfeccionando ese plan de acción con micro metas que te hagan avanzar cada día.
Ten en cuenta cuáles son los obstáculos que podrían aparecer o cuáles son aquellas cosas que debes ajustar. Por ejemplo: podría ser que necesites cambiar tus horarios para tener más tiempo y organizarte mejor.
Por último no olvides nunca cuál es tu gran: Porqué es decir tu gran motivo.
Cuando tienes un motivo o una razón muy fuerte acerca de por qué quieres conseguir lo que te has propuesto, todo resulta más fácil incluso superar la adversidad.
Escribe si es necesario cuál será esa recompensa que obtendrás al conseguir aquello que te propones y cómo va a cambiar tu vida e incluso la vida de quienes te rodean una vez que consigas lo que te propones.