“Cuando llegamos a Macedonia, nuestro cuerpo no tuvo ningún descanso, sino que nos vimos acosados por todas partes; conflictos por fuera, temores por dentro.”
2 Corintios 7:5 NVI
Pueda que pienses que Pablo era muy madura espiritualmente para sentirse decaído, pero no es verdad, Pablo sufrió desaliento, tensión, inquietud y hasta miedo; como nos pasa a cada uno de nosotros en nuestro vida Cristiana. Pregunta, donde tu vas para recuperar tus fuerzas en el momento de problemas o de aflicciones?. Dios nos alientas y El está con nosotros …….