Cuando una persona comienza el emprendimiento de lo que será su negocio, hay una idea que rara vez pasa por sus cabezas: se están colocando en una posición de liderazgo que exige conciencia y preparación.
Ser el jefe o la jefa no solo es quién se encarga de cumplir con los pagos, impuestos y nóminas. Ser jefe es tener también el papel de mentor, el maestro de la idea del negocio propio.
¿Hacia dónde va mi negocio? ¿Cuál es la idea que tengo de él? ¿Cómo lo haría yo? ¿Cómo descubrirlo y enseñarlo?