- La Preexistencia Divina de Jesús (como Dios/Espíritu):
- La escritura afirma la existencia de Jesús antes de su vida humana.
- No existía "separado y aparte del Padre". Por el contrario, "en Su deidad Él es el Padre y Creador".
- "El Espíritu de Jesús existió desde toda la eternidad porque Él es Dios Mismo".
- Juan 1:1, 14 es una cita clave que resume esta enseñanza: "En el principio era el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios. . . . Y el Verbo se hizo carne".
- Esto significa que "Jesús existió desde toda la eternidad como Dios".
- La No Preexistencia de la Humanidad de Jesús:
- Se hace una distinción crucial: "la humanidad de Jesús no existió antes de la Encarnación, excepto como un plan en la mente de Dios".
- Por lo tanto, "podemos decir que el Espíritu de Jesús preexistió a la Encarnación, pero no podemos decir que el Hijo preexistió a la Encarnación en ningún sentido sustancial".
- El "plan de la futura Filiación existió con Dios desde el principio—como la mente de Dios".
- El Verbo se hizo carne, convirtiéndose en "la expresión de Dios Padre en forma humana".
- Interpretación de Pasajes Bíblicos Clave:
- Juan 8:58 ("Antes que Abraham fuese, yo soy"): Se interpreta como una "referencia a la preexistencia de Jesús como el Dios del Antiguo Testamento".
- Juan 6:62 ("¿Qué, pues, si viereis al Hijo del Hombre subir adonde estaba antes?"): Se entiende de la misma manera, donde "Jesús usa la frase 'Hijo del hombre' como el equivalente de 'yo' o 'mí' en lugar de enfatizar Su humanidad".
- Juan 16:28 ("Yo salí del Padre"): También se refiere a la "preexistencia de Jesús como Dios". El texto explica: "La naturaleza divina de Jesús era Dios el Padre, por lo que el Cristo de doble naturaleza podía decir: 'Yo salí del Padre'". También puede describir "el Verbo, la mente de Dios, haciéndose carne y siendo enviado al mundo".
- Juan 17:5 ("Ahora pues, Padre, glorifícame tú al lado tuyo, con aquella gloria que tuve contigo antes que el mundo fuese"): Se aclara que Jesús "habló de la gloria que Él tenía como Dios en el principio y la gloria que el Hijo tenía en el plan y la mente de Dios". Es fundamental entender que "no podía significar que Jesús preexistió con gloria como el Hijo", porque "sabemos que la humanidad no preexistió a la Encarnación". Por lo tanto, Jesús "estaba hablando de la gloria que el Hijo tuvo en el plan de Dios desde el principio".
- Concepto de "El Verbo" como la Mente de Dios:
- Juan 1:1 es fundamental: "En el principio era el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios".
- Este "Verbo" es Jesús existiendo como Dios desde la eternidad.
- El Verbo "se hizo carne", lo que significa que la "mente de Dios" se manifestó en forma humana.
La fuente establece una distinción clara entre:
- El Espíritu/Dios/Verbo de Jesús: Que preexistió eternamente.
- La Humanidad de Jesús/El Hijo (en un sentido sustancial): Que no preexistió, sino que fue parte del plan divino y se materializó en la Encarnación.
En resumen, la preexistencia de Jesús es entendida como su existencia eterna y divina como Dios, el Verbo, quien no estuvo separado del Padre. Su humanidad, sin embargo, no preexistió, sino que fue un plan divino que se manifestó en la encarnación, cuando el Verbo (la mente de Dios) se hizo carne.
